Cómo trabajar la psicomotricidad

La psicomotricidad tiene mucha importancia en la educación, especialmente en la edad temprana donde el niño/a desarrolla a gran velocidad los siguientes niveles:

  • Nivel motor: permite dominar los movimientos del propio cuerpo y alcanzar mayor destreza en la motricidad gruesa como en la fina.
  • Nivel cognitivo: permite explorar y encontrar relaciones en diferentes situaciones. Mejorando la concentración, la creatividad y la atención.
  • Nivel socio-afectivo: permite desarrollar sus propias emociones, desarrollar la empatía e ir moldeando su propia personalidad, a través de diferentes experiencias y vivencias con sus iguales o adultos.

Por último destacar que contamos con dos tipos de psicomotricidad: dirigida y vivenciada.

La dirigida precisa de la ayuda de un especialista o adulto y la vivenciada se encuentra en las experiencias que tiene el niño/a con su entorno en su rutina diaria.

MOTRICIDAD GRUESA 

Es la habilidad de manejar el cuerpo para hacer movimientos grandes como es caminar, correr, saltar... que precisa de un esfuerzo para trabajar todas las partes del cuerpo. Requiere de un esfuerzo para fortalecer los músculos y ejercitar su equilibrio y su coordinación.


Compartimos los siguientes ejercicios de motricidad gruesa dirigida que se pueden trabajar con el niño/a, siempre adaptándolos a las características evolutivas de cada uno.

  • Lanzamiento de globos.

De 2 a 3 años: Golpear con diferentes partes del cuerpo intentando que éste no toque el suelo y/o que lo dirija a un lugar específico.

  • El juego del balón.

De 2 a 3 años: Dirigir el balón lanzándolo o rodándolo hacia un objetivo (Jugar a los bolos). También se puede marcar como objetivo, encestar el balón en una caja, cubo, etc.

  • Desplazamientos.

De 2 a 3 años: Realizar ejercicios como saltar con un pie, desplazarse de puntillas o hacia atrás. Podemos realizar pequeños circuitos alternando diferentes desplazamientos (subir y bajar escaleras, saltar controlando la caída con pies juntos y zancadas grandes para sobrepasar obstáculos).

  • Equilibrios

De 2 a 3 años: Dibujar en el suelo diferentes líneas (Rectas, curvas, espirales...) y que se desplacen de diferentes formas que potencien el equilibrio (Puntillas, un pie delante del otro...).

Otra variante puede ser utilizando diferentes alturas (bloques, bancos, sillas...).

  • Juego del agarre

De 2 a 3 años: Colgar o colocar los objetos en zonas donde el niño/a pueda alcanzarlo (encima de la cama, en el respaldo del sofá o encima de una mesa) fomentando su propio ingenio.  

MOTRICIDAD FINA

Es la habilidad de manejar el cuerpo para hacer movimientos de precisión y coordinación, como puede ser la óculo-manual, como por ejemplo: picar, modelar, recortar figuras, etc.


Compartimos los siguientes ejercicios de motricidad fina dirigida que se pueden trabajar con el niño/a, siempre adaptándolos a las características evolutivas de cada uno. 


Actividades de 2 - 3 años

  • VAMOS A PESCAR. Llenar un recipiente con 2-3 dedos de agua. En el interior de este pondremos diferentes tipos de tapones para que floten.

    El objetivo de este juego será pescar todos los tapones con la ayuda de dos palos de madera (Por ejemplo con "bajalenguas", son los palitos que usan los médicos).

  • TRASVASAMOS AGUA. Para esta actividad son necesarios dos recipientes (no muy grandes) y una esponja (que los niños/as puedan manipularla fácilmente con una mano). Llenar uno de los recipientes con agua y a jugar.

    El objetivo es conseguir trasvasar toda el agua en el otro recipiente con la esponja. Una vez conseguido repetirlo a la inversa y con la mano contraria.

  • ORGANIZAMOS TAPONES. En esta actividad se puede trabajar la motricidad fina pero también la seriación a través de los colores. Es necesario un cartón, y varios tapones de brick de leche (También la parte de la rosca). Hay que pegar la parte de la rosca en fila en el cartón, también hay que crear pequeñas tarjetas con círculos de colores y pintar los tapones con esos colores.

    El objetivo de este juego es enroscar los tapones siguiendo la serie que tienen en el modelo, al principio puede ser que necesiten ayuda.

     * En este caso la foto es sólo representativa, para niños de 2 a 3 años es más conveniente empezar primero por seriaciones de dos colores.

  • ORGANIZAMOS LAS PINZAS: Crear superficies de cartón o papel con diferentes colores (Cuadrados, círculos...) se pueden utilizar "gomets" o con pinturas, etc. Por otro lado utilizar pinzas para tender la ropa de colores o si no es posible utilizar las de madera y pintarle una pequeña parte con los mismos colores que hay en la superficie.

    El objetivo de esta actividad es colocar cada pinza en su color disponible.


    *Otra variante puede ser, crear varias bases donde en vez de colores haya círculos dónde poner las pinzas y los niños/as tengan que contarlos, así también trabajamos el conteo.

EXPERIMENTAMOS CON PLASTILINA: Un material como la plastilina es muy motivador para los más pequeños/as y es muy beneficioso para el desarrollo de la motricidad fina.

El objetivo de esta actividad es dejar experimentar a los niños/as manipulando la plastilina. También se puede proponerles, ayudándoles si es necesario, crear churros y bolas con las dos manos o encima de la mesa.

¿Sabéis que es posible hacer plastilina casera sin riesgos para los/las más pequeños/as? Pues a continuación encontraréis un vídeo que os explica cómo hacerlo.


Psicomotricidad en casa

Os traemos una propuesta para poder trabajar desde casa con los niños/as. Podéis disminuir o ampliar la dificultar de los circuitos y así adaptar los ejercicios a las características de vuestros hijos/as.

Como ideas os ofrecemos estos dos vídeos donde podéis encontrar una sesión de psicomotricidad pensada para niños/as de 2 a 3 años y otra para niños de 1-2 años (La podéis encontrar en el apartado de psicomotricidad del aula ositos). En ambas sesiones hay una breve actividad de activación del cuerpo, la cual se puede ampliar según la disposición de los niños/as, hay dos circuitos donde las estaciones presentan variaciones y como cierre un ejercicio de vuelta a la calma, donde se pueden realizar estiramiento o relajación.

No es necesario comprar ningún material de psicomotricidad, seguramente que con almohadones, cestos de la ropa, sillas, mantas, cajas... podéis crear una sesión casera muy divertida de psicomotricidad.

¡A disfrutarla!

Escuela Infantil "Ralet, Ralet"
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